AMELIE LENS

AMELIE LENS MUNDIAL

Hablamos con la joven promesa del techno tras su paso por Latinoamérica.

El último año ha sido de crecimiento vertiginoso para Amelie Lens, la joven DJ belga que ha tomado al mundo por sorpresa con sus sets cargados de melodías oscuras, voces femeninas, kicks bruscos y percusiones poderosas.

Después de haber lanzado su debut EP en el sello italiano Lyase Recordings, la joven le dio inicio a su ascenso meteórico al ser llamada por el dúo Pan Pot para formar parte de su sello discográfico, Second State, del cual Amelie Lens se siente orgullosa de ser parte. De repente, y casi por arte de magia, Amelie Lens pasó de pinchar en venues chicos a formar parte de flyers con DJs de trayectoria en noches de clubes y festivales sold out y curar sus propias noches en el prestigioso club Labyrinth en Hasselt, en Bélgica.

Mientras continúa con su apretada agenda de tours por el mundo, Amelie no deja de encontrar el tiempo para producir música excelente. Tal es el caso de su primer lanzamiento en Elevate, sello de Pig & Dan, en febrero de este año y su último lanzamiento en Second State, con un EP de tres tracks increíbles, cargados de su sonido característico con voces sofocantes y fuertes kicks llamado “Contradiction” que demuestra las excelentes habilidades como productora de la joven artista.

Hace unas semanas Amelie Lens pasó por Perú y Argentina, y logramos hablar con ella sobre su primera experiencia en la región.

Has empezado una colaboración con una marca de indumentaria belga diseñando remeras bajo el lema #RaverOnTour ¿Qué nos puedes contar sobre esto? ¿Amelie Lens asistente a raves actualmente y pierde su cabeza en la pista de baile o algo cambió desde que comenzaste a pinchar todos los fines de semana alrededor del mundo?

“Desarrollé mi interés en la música electronica cuando tenía alrededor de 15 o 16 años. La primera vez que la escuché, inmediatamente, quedé encantada. Solía viajar mucho, inclusive fuera de Bélgica, para ver algún DJ que me gustaba y disfrutar de las fiestas cuando era una adolescente.

Para mí, un raver es alguien que puede perder la cabeza en la pista de baile, alguien que está viviendo el momento escuchando y bailando la música sin pensar en nada más; y eso es lo que hice prácticamente todos los fines de semana siendo una adolescente. Pero eso cambió cuando comencé a producir mi propia música y a pinchar en diferentes fiestas porque me encuentro muy enfocada en lo que está pasando, en lo que está sonando…  Inclusive, cuando intento disfrutar el DJ set de otra persona. Realmente, estoy pensando -y no disfrutando- en cómo mezcla, en los tracks que suenan y en cuál sería mi técnica para sonar de esa forma. De todas formas, ¡todavía lo disfruto mucho ¡Ahora soy un tipo diferente de raver!”